Jesús Mínguez (AS)
La penúltima, al cabo, fue la última. Francisco Javier Castillejo, el mejor púgil español de la historia, cuelga los guantes, se baja del ring, pero no tira la toalla porque quiere seguir ligado al boxeo. “Después de hablar con mi preparador, mi familia y la gente que me quiere hemos decidido que ya he peleado bastante. He hecho más de lo que quería y pensaba. Lo he conseguido todo, gracias a Dios. Así que, ¿para qué seguir?”, se interroga con 41 años, 21 como profesional, seis títulos de campeón del mundo del superwelter y dos del medio, seis de campeón de Europa del superwelter, uno de campeón de España del superwelter y dos del Nacional del welter a sus espaldas.
El pasado 4 de abril, en La Cubierta de Leganés, Castillejo decía que había sido su “penúltimo” combate, que quería despedirse con una auténtica fiesta. Pero aquello salió tan bien, el nulo con Pablo Navascués fue un espectáculo tan grande, que era difícil superarlo. Ricardo Sánchez Atocha, su preparador y su sombra, le ha convencido para dejarlo, aunque él se encuentre como un toro. Continuar
1 comentario
En virtud de la edad que tiene Javier , es un sabio camino a seguir.