Por Andrés Pascual
Megapeleador Greb, que discute el mejor mediano de la historia y lo mejor libra por libra también.
¿Megapelea? ¿Qué es eso? A través del tiempo, las peleas estelares de la gran cartelera boxística han estado afectadas por circunstancias que escapan a lo puramente deportivo: el regionalismo, la raza, lo político y lo religioso han estado presentes a la hora de decidir el apoyo y las simpatías por un boxeador u otro.
En Estados Unidos, durante los primeros 30 años del siglo pasado, boxearon algunos de los mejores boxeadores de todos los tiempos de raza negra: Joe Gans, un verdadero Maestro del ring; Sam Langford, una maravilla que no logró ganar una faja mundial; Jack Johnson, que algunos consideran, exageradamente, el mejor completo de la historia; Harry Wills, que el racismo blanco evitó que se enfrentara a Jack Dempsey, porque existía la posibilidad de que ganara y tras esto, la hecatombe…
Cualquier estrella sepia del pugilismo podía llenar un estadio hasta el tope en un enfrentamiento contra un blanco; pero los fanáticos de raza blanca no iban a disfrutar del espectáculo que podía brindar un pugilista sepia; sino a verle caer ante el blanco, circunstancia que, únicamente, la posibilitaba un arreglo previo del bout…
Cuando la fanaticada blanca hizo suyo a Joe Louis por circunstancias ligeramente paisanistas, entonces comenzaron a apreciar en toda la extensión del término a los boxeadores de raza amarilla como los filipinos Ceferino García, Speedy Dado, Pablo Dano, Pancho Villa y al resto de raza negra; sin embargo, para llegar a un estado supremo y único de consagración en la historia del boxeo, el Bombardero Carmelita necesitó la ayuda de la política internacional y del cartel “el hombre que produjo la primera victoria contra Hitler”, por la brutal golpiza que le propinó a Max Schmelling en la segunda pelea entre ambos; no obstante, justo es decirlo, Louis tenía amplia popularidad en casi todos los sectores de la población americana del norte del país y contaba con las habilidades promotoriles de Mike Jacobs.
“Lo mejor libra por libra” fue una definición inventada para Sugar Ray Robinson, un peleador elegante, de movimientos gráciles, inteligente, de los muy pocos de verdadera tres distancias que han existido, intuitivo, asimilador, rápido y lo mejor técnicamente que se ha visto; Robinson era capaz de burlarse de la cartilla y hacer lo contraindicado con resultados favorables; pero el Robinson “maravilla” lo fue durante su estancia en la división welter, una vez que se desplazó al peso mediano, ya no era el mismo y, con mayor afectación, porque comenzó a ausentarse en períodos prolongados con el medio farandulero como sustituto de los trajines del ring.
Robinson enfrentó durante su carrera a por lo menos 10 pugilistas que están en el Salón de la Fama, por lo que, esas solas, clasifican fácilmente para el novedoso y estrafalario concepto de megapelea; porque, para que responda al exagerado andamiaje propagandístico con que la montan y a las mucho más que generosas montañas de dinero que mueven, necesita dos “superpeleadores” para que le interese a la historia sin el desenfreno como pretenden hoy.
Si se critica la cantidad de dinero que le pagan a los peloteros hoy, lo que está ocurriendo con los boxeadores, más que una locura, es una falta de respeto por donde quiera que se mire.
Si tomamos como válido el concepto megapelea, habría que llegar a la conclusión de que boxeadores como Harry Greb, Mickey Walter, Benny Leonard, Johnny Dundee, Jimmy McLarnin, Lou Ambers, Barney Ross, Willie Pep, Henry Armstrong…están por encima del concepto super de la actualidad y en niveles inalcanzables para los de hoy…
Harry Greb o Mickey Walter, desde sus pesos mediano y welter, retaban a ligerocompletos y completos de clase y ganaban y perdían; de hecho, la única derrota de Gene Tunney fue a manos de Greb, que peleó la cantidad de pleitos que, posiblemente, se necesite la suma de todos los que han efectuados cuantos peleadores existan hoy para igualarlo.
La división imaginaria que se ocupa de colocar a un verdadero “lo mejor libra por libra” al estilo tradicional y clásico, estuvo vacante moralmente desde que Roy Jones jr. perdió su clase profesional, hasta que decidieron que Maravilla Martínez también tenía oportunidad de competir… ¿Por cuánto tiempo seguirá ahí? ¿Quién sabe? Ahora mismo, la única cintura ajustable a esa faja es la del argentino. Tal vez el promotaje mediático haya tenido mucho que ver con no promover a varios buenos peleadores del momento hacia peleas grandes, por considerarlos de “de alto riesgo y poca recompensa” si un “elegido” pierde contra uno de ellos.
Megapeleadores fueron Alexis Arguello, Durán, Leonard, Monzón, Mantequilla Nápoles, Chávez, Finito López, Marcos A. Barreras, Horacio Acavalho, Olivares, Wilfredo Benítez, Hagler, Hearns, Whitaeker, Gómez, Salvador Sánchez, Mosley, Hopkins, Morales,…de más o menos tiempos cercanos. ¿Faltaran algunos? Por supuesto, confeccione su lista con los ausentes involuntarios y no deje fuera a Juan Manuel Márquez; a pesar de todo, tampoco a Pacquiao
Oscar de la Hoya fue más exagerado por la promoción que por su verdadera clase en el ring; no se puede estar en la cúspide del boxeo con algunas victorias consideradas “dudosas”. Tito Trinidad es, sin dudas, otro megapeleador de esta era, aunque nunca haya aprendido a caminar el ring.
El promotaje y la Media, confabulados contra el público en pro de los altos precios de la tarifa televisiva, bautizan como megapelea cualquier cosa; sin embargo, estos elementos son los primeros que saben que están mintiendo, de eso no hay dudas…
4 comentarios
PASCUAL TE FELICITO ULTIMAMENTE ESTAS HACIENDO BUENAS COLUMNAS SIN ESTAR INSINUANDO COSAS DE PACQUIAO NI HABLANDO DE LOS CUBANOS COMO SUPERIORIDAD BOXISTICA
Gracias Pascual por darnos estas verdades que en seris asi son. Con quien peleo Oscar de la Hoya y gano que se consideraba el mejor en esos tiempos? Ni le gano a Trinidad, golpeo a Chavez en sus cuarentas, perdio contra Mosley dos veces, el que solamente le felicito por ganarle es a Vargas. Y el nunca tenia buena quijada para el aguante. Vargas era el Khan de hoy. Aunque tenia muy buen golpe, pero cuando le pegaban en la quijada? El cai rapidamente. Te felicito Pascual por esta nueva era de buenos articulos. Que hasta hoy estan muy buenos y llenos de verdades y factualidades.
Ch33toh
Estoy de acuerdo con este y tus últimos artículos Pascualin. Sinceramente me gustan más tus artículos que los Chon Romero por que ese bato solo se dedica a seguir el juego de los promotoras. N unca dice verdades que a luces todos conocemos y nadie habla.
Felicidades desde Chilangolandia-capital de México.
Buen articulo,me ha gustado