@pilattiESPN
Sandor Martin logró la victoria más importante de su carrera y Mikey García padeció la frustración más grande en la suya. La pelea convertida en una celebración y homenaje a la comunidad agrícola de Fresno, terminó en pura decepción para el gran favorito.
Mikey fue superado, se vio lejos de sí mismo y perdió con justicia en las tarjetas. Dos jueces vieron la pelea 97-93 y un restante la vio empate 95-95. Esta vez las tarjetas fueron correctas, el zurdo español mostró un boxeo inteligente, un plan apropiado y su velocidad junto a un excelente juego de piernas le permitió dar el gran batacazo en su mero debut en los EEUU.
La victoria a Martin le abrirá muchas puertas y quizás un camino directo hacia una oportunidad de título. Para Mikey García la derrota es mucho más que una derrota. Es un recordatorio del grueso error cometido cuando decidió moverse al peso welter y sobre todo mostró que hoy, Mikey es más empresario que boxeador. Ha perdido el fuego y sin eso, pelear es una tortura. Como lo veremos en el análisis eso se vio en su desempeño.
El español pagaba 1200 por cada 100 dólares apostados. Está claro que habrá apostadores felices. No obstante, en el reparto de las bolsas, fue un millón y medio para Mikey y apenas ciento cincuenta mil para Sandor. Aunque su victoria, sin duda, valió mucho, pero mucho más que el dinero de las bolsas.