Según se ha dado a conocer, el combate entre Saúl “Canelo” Álvarez y Terence Crawford está prácticamente cerrado para el mes de septiembre después de que el jeque Turki Alalshikh convenciese al mexicano.
Pese a la gran diferencia de categorías que hay entre ambos y de que en un principio el propio Canelo lo consideraba un despropósito, finalmente el mexicano sucumbió al dinero y aceptó enfrentarlo pese todo lo dicho anteriormente y la desigualdad que habrá en el cuadrilátero.
Crawford, que es un peso welter natural y tendrá que subir tres categorías para enfrentarlo. En su último combate, Crawford decidió subir al peso superwelter y a pesar de ganar a Israil Madrimov, se vio muy lento y dejó una mala imagen, nada que ver con las grandes actuaciones que protagonizó en el welter o superligero.
Canelo tiene previsto pelear en mayo y parece ser que se enfrentará al actual campeón de la FIB el cubano, William Scull. Visto lo visto, la estrella mexicana tendrá un tranquilo 2025 frente a dos rivales asequibles y tendrá la oportunidad de volver a ser campeón indiscutible, evitando peleas de mayor riesgo como pelear con Christian Mbilli o Diego Pacheco.