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Les voy a compartir una serie de notas sobre la carrera de este boxeador, a los que les gusta leer se los van a aventar todos.

Floyd Mayweather: Lo que bien se siembra, bien se cosecha



Viernes, 13 de Junio de 2014 19:58

FloydMayweather k13062014 e7e6dVayamos hacia atrás en la historia y remontémonos a julio de 2009. Ese fue el mes en el que el anuncio de que Floyd "Money" Mayweather Jr. descolgaría los guantes acaparó los titulares de la prensa especializada.

Anteriormente, Floyd Mayweather se había mostrado reacio a salir del retiro, ya que consideraba que a lo largo de once años había alcanzado todas las metas que se propuso en el pugilismo profesional. Llegó a la cima y se jubiló estando en la cima.

"Otros boxeadores tienen que pelear, yo no tengo que pelear," señaló Mayweather un año antes en entrevista para el New York Times, dando a entender que su situación económica le permitiría seguir viviendo cómodamente fuera del boxeo. Sólo en 2007 se había embolsado la cantidad de $ 50 millones de dólares en ganancias por sus dos peleas ante Oscar De la Hoya y Ricky Hatton.

Cuando se le cuestionó sobre la gloria, el legado y la necesidad de todo deportista de encarar nuevos desafíos, respondió que "ya me he demostrado eso a mí mismo. Una vez que llegas a ser el mejor 'libra por libra', ya lo probaste todo."

Pero su ostentoso estilo de vida, malas inversiones y demandas millonarias de acreedores, aunadas a un adeudo de $ 6.4 millones de dólares al Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés), lo hicieron volver al ring un 19 de septiembre de 2009 para enfrentar al mexicano Juan Manuel Márquez, a quien apaleó durante doce rounds.

Previo a la celebración del combate, los críticos lo atacaron sin miramientos, ya que en febrero de ese mismo año rechazó una oferta de Golden Boy Promotions por el monto mínimo de $ 8 millones de dólares, que se incrementaría exponencialmente con un porcentaje de las ventas del Pague-Por-Ver (PPV), para medirse al hombre que destrozó al mexicano Antonio Margarito, el veterano "Sugar" Shane Mosley.

Técnicamente Floyd no se negó a pelear, solo hizo una contraoferta por $ 20 millones, una cantidad que se creía era demasiado alta para la realidad boxística que vivía y que solo él creía merecer.

Al enterarse de la suma que pedía para pelear con Mosley, su ex promotor, Bob Arum de Top Rank, declaró burlonamente que "nadie le va a dar a Mayweather esa cantidad de dinero para pelear con Pacquiao, Mosley o Jesucristo."

Era obvio que el viejo zorro seguía resentido porque el ahora apodado "Money" le comprobó con hechos que todo lo que le pidió y le fue negado durante los últimos años de su relación laboral, tenía sustento.

Unas semanas después del combate entre Floyd Mayweather y Zab Judah, el cual se realizó el 8 de abril de 2006, el entonces llamado "Pretty Boy" rechazó una oferta de $ 8 millones de dólares que le hizo Top Rank para enfrentarse a Antonio Margarito. Y pagando el valor de su contrato, el cual ascendía a $ 750 mil dólares, solicitó su carta de liberación.

Optó por convertirse en agente libre en razón de que el contrato para la pelea contra Margarito venía aparejado con una extensión promocional, cuyas cláusulas no le convenían. Ganando o perdiendo Top Rank garantizaba bolsas de $ 7 millones de dólares en futuros careos con Miguel Cotto y/o Ricky Hatton.

Floyd pretendía un mínimo de $ 10 millones para combatir contra cualquiera de los dos y una garantía de $ 20 millones en caso de un emparejamiento con Oscar De la Hoya. Pero tales pretenciones fueron tomadas como poco apegadas a la realidad.

El razonamiento de Bob Arum parecía correcto, ya que Floyd Mayweather no era un imán de taquilla en ese momento, ni tampoco una gran atracción de PPV. Púgiles como Bernard Hopkins, Fernando Vargas, Shane Mosley, Erik Morales y Manny Pacquiao, eran mucho más comerciales y se les pagaba menos dinero del que él intentaba conseguir.

Pero lo que el jerarca de Top Rank jamás vislumbró fue que el "Dream-match" en el que derrotó a Oscar De la Hoya, rompería los records de taquilla, de ventas de Pague-Por-Ver y de ganancias brutas, y que a la postre lo convertiría en una súper estrella.

"No me interesa De la Hoya contra Maywetaher, porque si promoviera esa pelea, estaría trabajando por un porcentaje tan pequeño que no valdría la pena," dijo Arum a ESPN luego de revelar la salida del "Pretty Boy" de Top Rank.

Pero lo más irónico fue que una vez que se quitó las ataduras, Floyd tuvo libertad de escoger oponente y obtuvo un cheque por la misma cantidad que hubiese conseguido enfrentado a Margarito y lo hizo contra el rival más cómodo que pudo haber encontrado, el argentino Carlos "El Tata" Baldomir.

Contra Márquez, la suma garantizada fue de $ 10 millones de dólares, que superó a la del primer ofrecimiento que se le hizo para medirse a Shane Mosley, mostrando una vez más que no era mal negociante. Al menos no en el boxeo.

Luego de contabilizarse los ingresos totales, terminó ganando $ 25 millones de dólares, que también fue mayor a los $ 20 que exigió en su contraoferta; una vez más Robert Arum estuvo equivocado.

El "Money" Mayweather siempre se ha preocupado por obtener el mayor ingreso posible con el menor riesgo. Y tal como lo había manejado desde el rompimiento con Top Rank hasta su primer retiro, lo sigue haciendo en la actualidad. Pero hay algo que no podemos omitir, la cantidad que pidió en 2006 por pelear con Mosley ahora le queda chica, ahora gana bolsas que sobrepasan los $ 30 millones de dólares.

En reciente entrevista para Yahoo Sports, Bob Arum reconoció finalmente que Mayweather siempre estuvo en lo correcto cuando le hacía recomendaciones sobre la forma en la que debía ser comercializado "y hasta cierto punto, le ha ido mejor haciéndolo por su cuenta."

Desde el momento en el que Floyd Mayweather jr. se convirtió en su propio jefe, trabajó muy duro para darle el carácter de celebridad a la nueva imagen que creó de sí mismo, el "Money Mayweather".

Dejó de promover su marca en el negocio del boxeo para comenzar a hacerlo en el negocio del entretenimiento y estableció un modelo de negocios en el que el pugilista es quien controla la totalidad de las fuentes de ingresos de sus peleas.

Lo que bien se siembra, bien se cocecha. No me sorprendería que el tiempo que dure activo en este deporte siga siendo reconocido como el atleta mejor pagado del planeta.

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Nunca le fue difícil pelear por dinero



Jueves, 06 de Junio de 2013 22:13

Comenzaba el 2010 y parecía que por más intentos de intermediarios por hacer coincidir en un mismo ring a Floyd Mayweather y a Manny Pacquiao, esta pelea jamás se realizaría.

Fue entonces que Mayweather tuvo que dejar de darle vueltas a "Sugar" Shane Mosley, un peleador al que estuvo evadiendo por mucho tiempo, y estampó su firma en un contrato para enfrentarlo el 1 de mayo de ese mismo año.

Mosley era el rival más atractivo que el "Money" Mayweather podía encontrar en ese momento. El puertorriqueño Miguel Cotto venía de ser noqueado por el filipino Manny Pacquiao y ningún peleador mexicano o mexicoamericano estaba lo suficientemente posicionado como para generar expectativas en un careo con uno de los mejores del planeta.

"Me di cuenta de que él [Floyd Mayweather] pelea por dinero. Quiere ser el mejor, pero asegurándose de que el cheque esté sobre la mesa. No hubo arreglo con Pacquiao y después de él soy yo quien tiene el cheque más grande, así que por eso aceptó," respondió Shane Mosley a un cuestionamiento del comentarista de la cadena HBO Max Kellerman.

La pelea se celebró en la MGM Grand Arena de Las Vegas, Nevada, distribuyéndose por televisión a través del sistema Pague-Por-Ver (PPV) por la cantidad de $ 54.95 dólares, por circuito cerrado en varias propiedades de la compañía MGM Mirage y también en salas de cine.

El PPV generó 1.4 millones de compras y con esas cifras Floyd Mayweather obtuvo ganancias personales de alrededor de $ 40 millones de dólares.

En sus siguientes dos combates, que fueron contra Víctor Ortiz y Miguel Cotto, sobrepasó las ganancias obtenidas con Shane Mosley.

A pesar de que se estableció en números el poder de convocatoria de actual "Rey Libra por Libra" del boxeo, las peleas de respaldo que incluyó la empresa Golden Boy Promotions contribuyeron en el éxito en ventas de los tres eventos y curiosamente en los mismos estuvo involucrada la súper estrella mexicana Saúl "Canelo" Álvarez.

En febrero del presente año, Floyd Mayweather estremeció al mundo del boxeo firmando un contrato con la cadena de televisión CBS/Showtime por seis peleas que está supuesto a realizar en un lapso de 30 meses y cuyas ganancias contempladas podrían sobrepasar los 200 millones de dólares.

El primer combate que el moreno de Grand Rapids, Michigan, pactó fue el que se celebró el pasado 4 de mayo en Las Vegas, Nevada, donde derrotó por decisión en doce vueltas al mexicoamericano Robert "El Fantasma" Guerrero.

Una vez más Saúl Álvarez estaba contemplado para formar parte del respaldo del evento, sin embargo prefirió no ser incluido cuando no le fue garantizado un combate contra Mayweather en septiembre del presente año.

El "Canelo" Álvarez estelarizó su propio evento el 14 de abril contra el norteamericano Austin Trout, obteniendo un triunfo que le valió unificar las coronas mundiales súper welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y de paso agenciarse la presea de campeón lineal de la categoría (Cinturón de la revista The Ring).

Aunque incluyeron en el pleito semifinal a Daniel Ponce de León y a Abner Mares, el hueco que dejó el "Canelo" no pudo ser tapado y la respuesta de los fanáticos de origen mexicano no fue la esperada.

Es difícil encontrar a alguien que pueda compararse al peleador tapatío en términos económicos y sin un talismán de ese calibre no hay garantía de éxito si tampoco se tiene en el combate principal a un "Peleador B" que genere expectativas reales.

La salida de Álvarez del Maywetaher-Guerrero se calculó en pérdidas de $ 200 mil compras en el PPV, pero la falta de oficialización del total de números de las compras hacen pensar que el impacto fue mayor. Algunas fuentes comentan que el número final no logró llegar al millón, aunque Showtime, Golden Boy Promotions y Mayweather Promotions insisten en que superaron esa cifra.

El contrato con CBS puso a muchos críticos y aficionados a pensar que Floyd Mayweather administraría sus combates de la misma forma en que lo hizo durante toda su carrera y asumiría los retos más importantes con mucha mesura, pero luego de que no obtuvo la esperada respuesta de los fans, está obligado a enfrentar en cada pelea al mejor pugilista disponible en ese momento.

Un peleador "A" necesariamente tiene que enfrentar a un rival de gran cartel para poder generar un interés legítimo en fanáticos y aficionados ocasionales. Saúl Álvarez era el mejor negocio desde hace nueve meses, pero el "Money" tuvo que fracasar en su debut con Showtime para poder entender que el contrato de treinta meses tendrá que ser ante rivales de primer nivel.

Como lo señaló Shane Mosley, el mejor negocio disponible es el que Mayweather elige, pero en la actualidad, cuando los combates entre los mejores están a la orden del día, el mejor negocio es el reto más grande que se pueda conseguir.

"Treinta meses más de trabajo y habremos terminado," dijo Floyd semanas antes de su combate contra Guerrero, en alusión a que al finalizar las seis peleas que vendió a CBS/Showtime, se retirará.

Le esperan meses difíciles al "Money" Mayweather y la primera real parada lleva el nombre de Saúl "Canelo" Álvarez.

¿Cree usted que Floyd Mayweather llegue invicto al final de su recorrido?

Crédito foto: Ethan Miller, Getty Images

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Nunca quiso ser la sombra de nadie



Martes, 20 de Agosto de 2013 21:04

MayweatherEra 11 de septiembre de 1999, faltaba una semana para la realización de la llamada "Pelea del Milenio" entre los campeones mundiales welter Oscar "Golden Boy" De la Hoya y Félix "Tito" Trinidad. La sede de la misma sería el Mandalai Bay Resort & Casino de Las Vegas, Nevada.

Los preparativos habían comenzado con mucho tiempo de antelación y la cartelera boxística que daría la bienvenida a los apostadores y a los aficionados al boxeo sería una protagonizada por el muchacho consentido de Top Rank, el "Pretty Boy" Floyd Mayweather Jr.

Mayweather expondría por cuarta ocasión la corona mundial súper pluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Su retador sería el puertorriqueño Carlos "El Toro" Genera, un boxeador con un record bastante atractivo, 32 victorias y 1 derrota, con 28 nocauts.

Ser el abridor de la semana del combate de De la Hoya y Félix Trinidad, dos de las máximas estrellas del boxeo junto con Roy Jones Jr., era algo que molestaba a Floyd, al igual que también le molestó no haber protagonizado el evento principal en su anterior pelea contra el ugandés Justin Juuko, ya que tuvo que soportar que la victoria de Oscar De la Hoya sobre Oba Carr se llevara todos los reflectores.

Más allá de eso, veía cómo sus colegas se embolsaban millones de dólares por combate, mientras que esa noche él solo ganaría medio millón. Su mejor paga hasta ese momento.

Semanas antes amenazó al promotor de Top Rank, Bob Arum, con retirarse si su salario no tenía un incremento significativo. Después de todo se le consideraba como uno de los mejores boxeadores "libra por libra" del planeta y era evidente que merecía un mejor trato.

Arum lo consoló comprándole un Lexus con un valor de $ 65 mil dólares y le prometió que si en cada pelea seguía haciendo gala de sus grandes dotes, vería su esfuerzo reflejado en mejores salarios.

Esa noche al sonar el campanazo inicial, saltó al ring para golpear a Genera con tal rencor que este último apenas sobrevivió al primer round. Al término del séptimo, el réferi detuvo la pelea, ya que se había tornado tan desnivelada que Floyd Mayweather estaba intentando forzar el nocaut.

"Quiero mostrarle al mundo que junto con Oscar De La Hoya y Roy Jones Jr., soy el mejor boxeador del mundo", dijo Mayweather Jr. al final de la lucha, dando a entender que no quería volver a ser relegado a un segundo plano. El no quería estar bajo la sobra de nadie.

A partir de allí vimos un cambio significativo en su personalidad. El niño mimado que lucía impecable en cada presentación, que se preocupaba por hacer lo correcto y agradar al respetable, se transformaría con el paso del tiempo en lo que es hoy, el ejemplo de lo que ningún boxeador debería llegar a ser.

Mucha gente creyó que lo hizo para sacar un poco de la frustración que traía dentro de sí, por el menosprecio al que fue objeto durante todo ese tiempo por parte de la promotora Top Rank y de la cadena HBO, la cual transmitía en exclusiva sus peleas.

Un mes más tarde rechazó una extensión de contrato por siete peleas con HBO, en la que se le ofreció la cantidad de $ 12.5 millones de dólares. Floyd Mayweather Jr. calificó el contrato como uno de esclavitud.

En respuesta exigió $ 3 millones de dólares como pago para su próximo combate, pero eso solo causó gracia en el entonces vicepresidente de deportes en HBO Lou Dibella –actualmente promotor de boxeo-, quien aseguró que el "Pretty Boy" tenía una visión exagerada de su valor como pugilista.

DiBella declaró que Mayweather pelaría una vez más para HBO por $ 750 mil dólares, cantidad monetaria que estaba estipulada en su contrato y luego analizarían su futuro salarial con la cadena, ya que no era un producto probado.

Han pasado casi catorce años desde aquellos sucesos y Floyd ya no trabaja más con Top Rank ni con HBO. Ahora es el deportista mejor pagado de la actualidad, el mejor boxeador del planeta y el rey de los eventos Pague-Por-Ver (PPV).

Él nunca quiso ser la sombra de nadie y hoy en día no existe nadie que le haga sombra.

Crédito foto: Ethan Miller, Getty Images

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No le fue fácil convertirse en el atleta mejor pagado



Martes, 10 de Septiembre de 2013 23:01

mayweather pikset102013La garantía de $ 41.5 millones de dólares que le hicieron al norteamericano Floyd "Money" Mayweather para su pelea de este sábado contra el mexicano Saúl "Canelo" Álvarez, no solo ha causado revuelo en el universo del boxeo, sino que también en el resto de los deportes, ya que nos encontramos en presencia del atleta mejor pagado de la actualidad.

¿Cómo llegó a esas latitudes? La respuesta abarca más que "trabajo duro y dedicación". Detrás de él existe una gran estrategia comercial que magnifica cualquier paso que da tanto dentro como fuera del boxeo y con la que se procura crear el mayor impacto posible en cada una de sus peleas, a base de especulación y simulación.

Solo para ejemplificar, la fórmula para calcular la garantía de su salario, el cual podría incrementarse si la pelea es un trancazo monetario, se basó en las entradas de taquilla vendidas, proyecciones de las compras de Pague-Por-Ver (PPV), de circuito cerrado e ingresos por la transmisión internacional. Lo que quiere decir que ese sueldo es una proyección de lo que puede alcanzar si las cosas salen como tienen contemplado.

Pero no siempre fue todo miel sobre hojuelas para el oriundo de Grand Rapids, Michigan. Sus primeros ensayos de PPV terminaron siendo desastrosos y la cadena que los transmitió, Home Box Office (HBO), se encontraba muy decepcionada.

Para ser más exactos en el tiempo, nos remontaremos al 25 de junio de 2005, cuando Floyd Mayweather Jr. afrontaba el que hasta el momento era el mayor reto de su carrera, encabezar un programa transmitido por PPV.

Floyd retaba al campeón mundial súper ligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) el canadiense Arturo "Thunder" Gatti y a domicilio, pues la cartelera se desarrolló en Atlantic City, Nueva Jersey, ciudad en donde este último era considerado un ídolo.

En los tiempos recientes hemos visto a un Mayweather convertido en un monstruo del marketing, que se inserta por default como figura principal de cualquier función en la que es programado. Pero en su pelea frente a Gatti él no era el "Perro Grande" de la promoción, él llegó como aspirante a la corona del mundo y como el "Peleador B" en el ring.

La fecha de televisión era exclusiva de Main Events, empresa promotora de Arturo Gatti, y se le ofreció la pelea a Floyd porque entonces ya era considerado el mejor boxeador "Libra por Libra" del planeta y eso podría significar grandes ganancias para la promoción y para el propio Gatti.

La proyecciones fueron bastante alentadoras, ya que Gatti era un imán de taquilla y reconocido en la escena boxística por sus guerras encarnizadas contra Ivan Robinson, Gabriel Ruelas y su trilogía con Micky Ward.

Los salarios que se establecieron para los peleadores fueron de $ 3,1 millones de dólares para Floyd Mayweather y de $ 3,5 millones para Arturo Gatti.

"Creemos que esta pelea obtendrá alrededor de 500 mil compras. Eso marcará a Floyd como un producto de los canales de pago," manifestó Bob Arum, promotor de Mayweather, y explicó que:

"Este negocio no es diferente que el negocio del cine. Si Julia Roberts tiene un gran éxito, entonces se considera que es una estrella financiable, si una actriz se hunde en la taquilla en una o dos películas, entonces no se consideran financiables más. Así que Floyd, después de esta pelea, que estoy seguro que va a salir muy bien, tiene que tener peleas de alta visibilidad."

Aún cuando Gatti era la figura principal, nadie lo tenía como favorito para llevarse el triunfo. De hecho las apuestas estaban en su contra y la prensa vaticinaba una fácil victoria para Floyd Mayweather.

Al darse a conocer los números del PPV Mayweather vs. Gatti, mucha gente quedó decepcionada al ver que apenas alcanzaron las 365 mil compras.

Aun con esos números Floyd poseía mucho potencial. Su personalidad había alcanzado el punto perfecto, sabía hablar con el micrófono, era arrogante sobre el ring y repudiado por un sector importante de fans. Si lo enfrentaban a boxeadores de gran arrastre podrían encontrar ese impulso que necesitaba.

"Dicen que soy engreído, arrogante, pero no es más que ser 'súper-seguro'", dijo Mayweather a la prensa, agregando que: "yo realmente creo en mí mismo. Lo que tengo es un talento dado por Dios y sé que soy bueno".

En sus peleas de 2006 los números fueron en la misma ruta. Contra Zab Judah obtuvo 375 mil compras y ante Carlos Balomir 325 mil. El primero no atravesaba por su mejor momento boxístico y el segundo no era un rival creíble, por lo que no muchos creyeron que valiera la pena comprar el PPV.

Además de eso, a Floyd solo lo admiraban en cerrados círculos de puristas del boxeo y los fanáticos casuales apenas toleraban su estilo de pelea. Si no obtenía un empuje significativo, jamás despegaría comercialmente. Él tenía las herramientas para lograrlo, solo necesitaba que las personas voltearan a verlo.

Fue entonces que recibió el toque mágico del "Golden Boy" Oscar De la Hoya. Floyd añoraba tanto esa pelea que aseguró que si no lograba atraer la atención de Oscar y enfrentarlo, se retiraría del boxeo.

El combate se pactó para el 5 de mayo de 2007 en el MGM Grand de Las Vegas, Nevada, y con el anuncio del mismo, el "Pretty Boy" dejó de existir para abrir paso al "Money" Mayweather. Un boxeador que practicaba el culto a la personalidad, que abría la boca solo para vanagloriarse de su propio éxito, de la buena vida que se daba, de su dinero, de sus joyas y de sus carros de lujo.

Floyd se había convertido en el villano perfecto y enfrentaría ni más ni menos que al máximo ídolo del boxeo, al muchacho del poster. Y la promoción fue tan masiva que pronto todo el universo del boxeo aguardaba por esta pelea.

El resultado fue impactante, la pelea se convirtió en la más lucrativa de la historia al obtener ganancias de $ 165 millones de dólares; record de taquilla que ascendió a $ 18 millones 419 mil 200 dólares; 2.45 millones en compras de PPV en Estados Unidos, que significaron $ 136 millones 853 mil 700 dólares.

Oscar De la Hoya ganó $ 52 millones de dólares, mientras que Floyd Mayweather obtuvo $ 25 millones de dólares. Cifras record para ambos.

El toque de Oscar ayudaría años más tarde a consolidar la carrera del filipino Manny Pacquiao, pero este púgil jamás logró emular el éxito obtenido por Floyd, quien ha formado un imperio en torno al personaje que perfeccionó con los años y en la actualidad sigue haciéndole creer a la audiencia que es el rostro del boxeo.

Es por eso que desde que se pactó el combate de este sábado en contra del "Canelo" Álvarez, se indujo en la mente del fanático que rompería todo tipo de registros monetarios en el pugilismo. Porque la especulación y la simulación siempre han sido las claves para el éxito en la carrera de Floyd Mayweather y al sol de hoy nos siguen sorprendiendo los resultados de su trabajo de marketing.

Crédito foto: Stephanie Trapp, Showtime

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Pana, este post deberías cologarlo en cualquier foro de boxeo menos en éste, que mucho forista mexicano ultrnacionalista lo ha hecho devenir en mediocre y bajo de calidad... Floyd es el mejor LxL de hace una década para acá pero aquí muy pocos le van a otorgar ese crédito, antes preferirían espetarte que Julito y Canelin son dos de las mejores promesas del boxeo y que Bam Bam Ríos es un peleadorazo

Simplemente uno de los mejores boxeadores de la historia de este deporte.

Claro, no por nada gana tanta plata por combate.