Pero para que veas que o no me cierro a ningún comentario y que me gusta aprender, me puse a buscar y encontré este buen articulo:
¡Maldito peso pactado!, una historia de los "catch weight"
Por: Damián Ferrer
En estos últimos años existe una moda que que ya raja en la molestia del fan del boxeo que ama la igualdad de condiciones en los combates. Y me refiero, al “catch weight”, o en buen español, “peso intermedio o pactado”.
Dicha acción no es nueva, y en el pasado se hizo en varias ocasiones, pero en tiempos donde no existían todos los pesos, por ejemplo, de 118 libras brincaban a las 126 o de 147 a 160 libras. Pero ya con el tiempo el AMB y CMB añadieron los pesos que estaban enmedio como las 122 y 154 libras. Hoy en día, ni con eso les basta a los boxeadores que tratan de buscar la manera de llevar ciertas ventajas al combate y que entienden que un “catch weight” es lo ideal.
A Manny Pacquiao lo tildan del rey en esta materia, de que fue la “súper estrella” de estos tiempos que nuevamente lo puso de moda. Pero para sorpresa de muchos, el no fue quien lo empezó, sino su mayor detractor: Floyd Mayweather Jr.
Esto fue en el mismo 2009, un mes antes que el filipino hiciera su primer “catch weight”. Mayweather venía de un retiro de casi dos años y decidió enfrentar al segundo mejor “libra por libra” en ese entonces, Juan Manuel Márquez. La pelea fue no titular y fue acordada en las 144 libras, la cuales el norteamericano no pudo marcar y termino pagando $600,000 dólares por las dos libras extras que marcó. Tres semanas después fue el famoso “catch weight” de Pacquiao vs. Cotto en donde el filipino retó por el campeonato de las 147 libras OMB al boricua, pero en un peso acordado de 145 libras.
Esas cosas yo no las podré entender, sé que muchos aceptan la condición ya que les garantizará una buena bolsa, y que el que lo propone busca alguna ventaja física. Pero yo soy fiel creyente de que si quieres el título de algún peso y crees que no podrás marcar ese peso, porque eres de un peso chico, no pretendas que el campeón baje para defender el título de un peso fuera del que el reglamento ordena. Sé que si pesas aunque sea una libra más de una división ya automáticamente entras en la próxima, pero vamos, para eso fue que se hicieron unos pesos oficiales, así las peleas se suponen que sean justas sin ventajas de ningún tipo. El colmo de todo es que Pacquiao en su siguiente pelea defendió el título que le arrebató a Cotto, ante al africano Joshua Clottey, pero esta vez sin “catch weight” alguno, si no, en 147 libras exactas, no obligó a Clottey a bajar ni una onza.
Pero peor aún, luego de Clottey, el filipino peleó ante el mexicano Antonio Margarito por el titulo vacante de las 154 libras del CMB, pero en otro “catch weight” de 150 libras. O sea, dos peleas antes, Pacquiao obligó a Cotto a bajar a 145 libras para luego pelear por el título de 154 en 150 libras con un rival más grande que el boricua. ¿Alguien me puede explicar eso? Es casi ilógico, por eso me apestan los “catch weight” y detesto a las organizaciones que lo avalan para coger sus porciento sin importar la salud, o lo parejo que se torne el combate, ya que muchas veces bajar una o dos libras de más, pudiera ser perjudicial para el peleador que las “puja” hasta llegar al deshidratamiento.
En el caso de Mayweather, si pactar peso es algo descabellado, imaginen no cumplir con lo pactado. Luego, Mayweather, intentó callarnos peleando frente a los campeones de un peso superior al suyo, aunque él humanamente no puede marcarlo, ya que jamás en su carrera ha pesado 154 libras. Frente a De la Hoya y Cotto, ninguno de los dos le propuso un peso intermedio, y hasta se llenó la boca alardeando sobre ello, diciendo que usted debe retar al campeón en las condiciones establecidas, que no quería ningún tipo de excusas si ganaba. En ambas peleas, Mayweather marcó por debajo del peso establecido. Frente a De la Hoya pesó 150 libras y frente a Cotto 151 libras, que de hecho, es lo más que ha pesado en toda su carrera.
Por alguna razón, propuso que su pelea frente al mexicano Saúl “Canelo” Álvarez se hiciera en el ya famoso “catch weight” de 152 libras por los títulos del AMB y CMB que poseía el mexicano. ¿Por qué al Canelo sí, y a De la Hoya y Cotto no? Yo de verdad aún no lo entiendo, ya que los talentos de Óscar y Miguel son superiores a los del Canelo. Seguro que fue por lo grande y ancho del Canelo, quizás fue por lo mismo que Pacquiao se lo propuso a Cotto allá en el 2009. De alguna u otra manera temieron a la fortaleza de un peleador sólido en su peso natural.
Algo no entiendo, y esto son los pesos pactados que ha exigido el boricua Miguel Cotto. ¿Por qué lo digo? Pues se entiende que para proponer un “catch weight” debes de al menos tratar de buscar alguna ventaja, o tal vez, que tu rival se sacrifique a la hora de marcar el peso. Frente a Margarito exigió que la pelea fuera en 153 libras por su título de las 154 libras AMB, sí 153 libras, cuando el mexicano no se ha conocido nunca por tener problemas en marcar el peso, ni en el tiempo que militó en las 147 libras y mucho menos los tuvo lo poquito que estuvo en las 154 libras donde apenas hizo cuatro peleas. Lo más que ha pesado Margarito en toda su carrera fue 154 libras y antes de Cotto, enfrentó a Pacquiao en 150 libras, o sea, no creo que para el mexicano fuese un reto real marcar 153 libras, y así fue, en el pesaje ante el boricua marcó 152 libras y media.
Algo similar hizo Cotto con Maravilla Martínez, con quien peleó en un “catch weight” de 159 libras por el título del CMB de las 160 libras que posee Maravilla. ¿El detalle? Pues es que Martínez es un 160 libras por obligación. Él subió a ese peso a buscar peleas y salarios ya que en 154 libras muchos le dieron la espalda. Y para otra vez “bulear” los “catch weight” que el boricua exige, el argentino lo más que ha pesado en su carrera son 159 libras. Así es amigos, el argentino lleva casi cinco años militando en las 160 libras, cuatro de ellos como campeón y jamás ha marcado 160 libras en su carrera. Por lo cual me da a pensar que los “catch weight” que ha exigido Cotto, son más por ego, que por beneficio propio.
No crean que eso de “catch weight” son caprichos de las súper estrellas de esta era, porque se equivocan. Ya que uno de los mejores latinos en la historia y uno de los norteamericanos más grandes que ha dado ese país, alguna vez lo propusieron. La leyenda viviente mexicana, Julio César Chávez propuso un “catch weight” cuando retó al recién coronado campeón de las 147 libras del CMB, Pernell Whitaker. Chávez y su equipo quisieron que la pelea fuera por el título de las 147 libras, pero en un peso intermedio de 145 libras. El combate terminó en un polémico empate, que favoreció al mexicano, quien marchaba aun invicto en 87 combates. Con dicho empate, perdió la oportunidad que buscaba en convertirse campeón en cuatro divisiones.
Si creen que lo han leído todo sobre los pesos pactados, les diré que están equivocados. Ahora siéntense y pónganse cómodos que en estos momentos leerán el “catch weight” más asqueroso de la historia. Después que el gran Sugar Ray Leonard derrotó al campeón indiscutido de las 160 libras, Marvin Hagler, este tuvo otro “mini” retiro más en su carrera y no peleó por un año y medio. Cuando decidió regresar, lo hizo peleando en una división superior a las 160 libras, donde había peleado la última vez. Leonard decidió retar al campeón de las 175 libras del CMB Donny Lalonde. Esperen, ¿la división que le sigue a las 160 libras no son las 168? Así es amigos, pero no crean que me equivoqué, Leonard pactó un combate en las 168 libras, por el título vacante de dicho peso y además se las ingenió para que el campeón de las 175 libras, Lalonde, peleara en 168 libras para que además del título vacante de las 168 libras, defendiera el suyo de las 175 libras. Así como lo leen, el gran Sugar Ray Leonard ganó dos títulos de dos diferentes divisiones en una sola pelea. ¿Increíble verdad? Eso pasa cuando se junta una súper estrella, un súper promotor y una organización que solo piensa en dinero.
Esto no lo hago para restarle crédito a las carreras de los que hayan hecho alguna vez un “catch weight” porque a todos los que aquí mencione, tienen méritos de sobras para estar donde están, o donde estuvieron a nivel mundial e histórico en el boxeo. Pero sí tendrán un asterisco en sus carreras (así como lo tienen Sammy Sosa, Barry Bonds y Mark McGwire en el béisbol), a la hora de fiscalizar cada título que alguna vez ganaron. Además, hago el aparte de engrandecer carreras como las de Sugar Ray Robinson. Este es para muchos el mejor libra por libra de todos los tiempos, incluyendo a este servidor, y quién jamás necesitó un “catch weight”, aun siendo él una gran estrella y estando en desventajas físicas en muchas de sus peleas más importantes. Robinson si quería retar al campeón de una división superior a la de él, lo hacía, así llegará al pesaje 15 libras de menos. Muestra de esto fueron los seis combates en nueve años que encarnó con la otra leyenda Jake LaMotta.
Robinson lo más cercano que estuvo en un pesaje ante LaMotta fue en su último combate ante él, donde pesó 155 libras y LaMotta marcó 160 libras por el título mundial mediano. El pesaje más lejano fue en su segunda pelea ante LaMotta, combate en que perdió Robinson su invicto. Esa pelea fue una no titular, y Robinson marcó 144.5 libras y LaMotta 160.5 libras. Así es, 16 libras de diferencia sin contar las que debió subir la noche de la pelea.
¿Quieren más de Robinson? Pues en otro caso donde mostró porque es el mejor de todos los tiempos, fue cuando retó al campeón de las 175 libras, Joey Maxim. En esta pelea Robinson pesó 157.5 libras y su rival 173. La pelea fue en el Yankee Stadium un verano del 1952. La calor era de 104 grados, el referí tuvo que ser reemplazado por otro referí gracias a la abrumadora calor. Robinson, finalmente se desplomó por el asfixiante calor en el asalto número 13. Como dato curioso, Robinson dominaba ampliamente en las tres tarjetas de los jueces y además fue la única vez en su carrera, de 200 peleas, que fue puesto fuera de combate. Por historias como estas, y muchas otras no tan extremas, es que detesto los “catch weight”. Cada vez que las pienso me hace acordarle unos de “los porqués” Sugar Ray Robinson es el mejor de todos los tiempos. Mis respetos a todos los boxeadores, en especial a este caballero que además de talentoso tenía los “cojones” bien puestos, para que aun siendo la estrella, no titubear en retar al campeón en “su ambiente” natural y jamás pedir un asqueroso “catch weight”. No hay forma de justificar ningún “catch weight”, no existe la manera que un combate de esta forma sea neutral y parejo para ambos peleadores. Al César lo del César y a Robinson lo de Robinson.