Ver entrenar a Guillermo Rigondeaux junto a Hairon Socarras, es como estar en una película en la que podemos ver el futuro y el presente del boxeo cubano, juntos, encima de un ring. Sin menoscabar la opinión de nadie que siga el boxeo, podemos afirmar casi con absoluta certeza, que el doble campeón mundial de las 122 libras “El Chacal” Rigondeaux es hoy por hoy, uno de los boxeadores técnicamente mejores dotados del boxeo en todas sus divisiones.
Por el otro lado, Hairon Socarras que también desarrolla su carrera en las 122 libras con un record invicto hasta la fecha, representa la antítesis del excelso tecnicismo que derrocha Rigondeaux, para mostrarnos un ángulo diferente de ver el boxeo, cuando vemos cómo destruye a sus rivales en base a la potencia y agresividad que desarrolla en sus peleas, propinando nocauts devastadores e impresionantes.
Además, es ver como un “Maestro” como Rigondeaux, se toma incluso el tiempo para súbitamente, detener sesiones de esparring, para indicarle al joven Socarras que está cometiendo algunos errores y que debe corregirlos. Esta atípica manera de verles hacer su trabajo, nos mostró la empatía de Rigo hacia este joven prospecto y ver en el rostro de Socarras la atención que ponía en cada indicación, llamó nuestra atención pues estas acciones son poco usuales dentro del boxeo rentado.
Luego, las palabras de Socarras disiparon todas mis dudas. “Es un placer y privilegio tener la oportunidad de entrenar junto a un boxeador como Rigondeaux. Él es un Maestro en esto, y aprendemos mucho cuando trabajamos juntos en los entrenamientos. Pero, lo que aprendo lo aplico a mi estilo, miro mucho boxeo y a muchos boxeadores y de todos algo se aprende, lo que hago es agrupar lo aprendido y acomodarlo a mi estilo de combate”
Estas palabras de Socarras sonaron muy lógicas y creemos que esa debe ser la práctica común. Rigondeaux tiene un estilo muy difícil de imitar. Socarras en cambio, nos muestra un boxeo más agresivo y menos ordenado quizás, pero en base a fuerza, determinación y apoyado en la excelente preparación física que realiza junto a Jorge Rubio, termina por construir un modelo donde el nocaut está en el ambiente en cada una de sus peleas.
Ambos pugilistas entrenan bajo la tutela de Jorge Rubio en el Sur de Florida. Hemos visto como Rubio aplica a cada uno de ellos, métodos diferentes de preparación. “Son dos estilos distintos y en cada uno, debemos trabajar para explotar sus mejores habilidades. Hairon es un peleador del que podría decir que representa la filosofía del boxeo de Jorge Rubio, he trabajado con Socarras desde que es un niño y es satisfactorio ver como poco a poco, va logrando sus metas en el boxeo profesional”
“Rigondeaux es la “mata” del boxeo, trabajar junto a un talento como el que posee “El Chacal” es algo impresionante. A veces uno aprende de sus boxeadores y Rigo es un atleta del que muchos entrenadores hemos aprendido. No se trata de dejarlo hacer lo que él decida, sino de dejarlo desarrollar su talento, implementar detalles en los que veamos que tiene alguna falla, no es perfecto y se trata de mejorar esos detalles. Básicamente es en los que trabajamos en cada campamento. Además, nos enfocamos mucho en el estilo del rival de turno”
Durante mucho tiempo, hemos asistido al GYM de Rubio para ver los entrenamientos de este par de sólidos representantes del boxeo cubano. Hemos visto cómo Rigondeaux conquisto al mundo con su casi mágico boxeo. Y también, hemos observado el paulatino desarrollo de Socarras desde sus inicios. Siempre regresamos a casa, convencidos de que es una dicha haber coincidido en la época en la que Rigondeaux peleaba, y agradeciendo también, tener la ocasión de ver a un joven como Socarras, quien está llamado a conseguir grandes cosas dentro del boxeo rentado en USA.
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